Partido Comunista de Chile - Regional Iquique

lunes, enero 08, 2007

Por el derecho a una pension digna

Por el derecho a una pensión digna.
(Publicado en Diario 21 de Iquique)
En contra de la opinión mayoritaria de los chilenos de realizar una profunda reforma provisional, que incluya la creación de una AFP estatal, el gobierno envió su proyecto de reforma en diciembre. Según la encuesta CERC de agosto pasado un 77% de los chilenos apoya la creación de una AFP estatal. Esta idea apunta a crear una competencia real entre las AFP, como en la actualidad ocurre con FONASA en el marco de las ISAPRES.
Salvo la propuesta de la izquierda de instituir una pensión básica solidaria garantizada por el Estado para todos quienes no reciban pensiones o éstas sean bajas; así como incorporar a los trabajadores independientes, en la propuesta oficial predomina el peso de la línea tecnócrata neoliberal.
Bajo la dictadura –a partir de 1981- se eliminó el aporte patronal y se impuso el ahorro forzoso de los trabajadores en administradoras de pensiones que hasta hoy han sido incapaces de garantizar una pensión digna a los chilenos, sirviendo en definitiva los caudales de los trabajadores para el manejo del gran capital. Esta estructura es la que se conserva en la base del proyecto gubernamental.
La llamada pensión básica solidaria propuesta llegaría en régimen a $75.000 mensuales, similar a la actual pensión mínima, con el requisito del beneficiario haber cumplido 65 años y pertenecer al 60% de menores ingresos de la población. Esa cifra se otorgará, de modo decreciente, a todos quienes perciban pensiones AFP inferiores a $200.000 mensuales o no tengan ninguna.
Claro que, lamentablemente, se ha impuesto que el pago de la pensión solidaria se postergue hasta el 2008. Además, ese año la Pensión Máxima que contará con Aporte Solidario solo serán las de 60.000 pesos o menos. Recién cinco años después, el año 2012, se otorgará el pilar solidario a todo el 60% mas pobre del país con tope en 200.000 pesos de ingreso total. En la asignación de la pensión básica continúan siendo perjudicadas las mujeres que, aunque jubilen a los 60 años y no a los 65 como proponían los tecnócratas, no tendrán derecho al pilar solidario sino a los 65. Los neoliberales dieron un primer paso en su intento de prolongar el trabajo de las mujeres.
No hay ninguna razón que justifique esta demora. Aliviar la situación de la mayoría de los afiliados a las AFP, el 60%, quienes están condenados a no recibir pensión alguna, o una muy exigua, no puede ni debe postergarse. Postergar hasta el 2008, es una decisión tan torpe que la derecha la ha aprovechado para tomar demagógicamente la bandera del pago a partir del 2007 para lo que efectivamente existen hoy recursos y que es lo que exigen los trabajadores a través de la CUT y sus organizaciones cuya demanda de iniciar el 2007 y culminar el 2009 es completamente posible. Plantean, además, que ninguna pensión sea inferior a 85 mil pesos.
Por otro lado este proyecto neoliberal presentado no considera ni una sola medida para asegurar el financiamiento en el largo plazo de una previsión decente. Es el momento de introducir demandas nacionales como el pago de royalty por nuestros recursos naturales, en primer lugar el cobre, Es el momento de plantear una Reforma Tributaria para garantizar los derechos previsionales de los chilenos así como el derecho a una salud y una educación dignas.
Se lanzó por la borda, el planteamiento de la CUT de garantizar una pensión con una tasa de reemplazo de 70% hasta el nivel tope de cotización. Ello es posible si se restablece gradualmente el sistema de reparto financiado en parte por las cotizaciones previsionales y, como lo han pedido los presidentes de la ANEF y la CUT en la ceremonia de presentación del proyecto de ley, restableciendo el aporte patronal velando por los intereses de los pequeños y medianos empresarios. La privatización del sistema previsional, ha significado que, a partir de 1981, el Estado ha debido asumir, con sus propios recursos, el pago de todas las pensiones, incluyendo aquellas pocas pagadas por las AFP, las que se han financiado íntegramente con subsidios públicos. La reforma propuesta asume que esta situación se prolongará indefinidamente en el tiempo. Pero sigue excluyendo todo aporte del capital y el modo de poner fin a este abuso es el de las reformas impositivas de modo que paguen más los que se apropian de la mayor parte del producto del trabajo. Además, nada se propone respecto de la declaración y no pago de los aporte previsionales de los trabajadores que se les descuentan pero que no se integran a sus fondos. Así que los trabajadores a ponerse las pilas este 2007, por el derecho a una pensión digna.

Epifanio Flores


Partido Comunista de Chile - Comite Regional Iquique