Para terminar con la exclusión

Derrotar electoralmente a la derecha en las elecciones parlamentarias y propinar un fuerte golpe a la exclusión es una posibilidad real; en particular en nuestra región de Tarapacá –si hay generosidad y altura de miras- podemos construir un acuerdo parlamentario de conjunto la izquierda extraparlamentaria y el Juntos Podemos, con el partido Fuerza País y con la Concertación. De hecho, ya hay un acuerdo nacional entre el Partido Comunista y la Concertación en su conjunto y solo falta ver las formas como se va a concretar y los lugares donde se haría realidad el acuerdo parlamentario. Lo nuevo en esto es que acá está la disposición del Partido Comunista con Fuerza País de ir juntos y desde Iquique el PC ha propuesto que en ese acuerdo global sea considerado el partido Fuerza País y, que además, sea extendido hacia la circunscripción senatorial, lo que incluiría en el acuerdo a la región Arica-Parinacota. En términos claros esto significa que en el distrito 2 iría un candidato del acuerdo PC-Fuerza País y un candidato que defina la Concertación. Lo mismo se replicaría en la circunscripción senatorial. Habría que estudiar acuerdos en el distrito 1 y 3.
Pero a la ya peculiarísima y veces decadente política local tal parece que se ha ido instalando una suerte de derrotismo frente a la “locomotora” Piñera y algunos han optado por las vieja táctica política del “sálvese quien pueda”, lo que lleva a que en lugar de instalar generosidad y desprendimiento en función de terminar con la exclusión social, política y cultural, comiencen a aflorar los proyectos personales, lo que es capaz de corroer las mejores iniciativas políticas.
Otros reflotan viscerales y las más añejas fórmulas de anticomunismo para cerrarse a cualquier acuerdo con ese partido en un porfiado afán de arrinconarlo cuál eterno “desaparecido”, excluido de la política. Esconden que es justamente este partido el que más ha sufrido de persecuciones y de la exclusión; que fue el primero en ponerse de frente en la lucha contra la dictadura y a quien había que arrinconar al final de esta interminable transición; que es el partido que más aboga hoy para abrir espacios democráticos para la participación del pueblo. Podríamos, además, agregar, que es talvez el único partido tradicional que jamás ha apoyado ninguna aventura antidemocrática en nuestro país.
Es necesario que todos comprendamos que la posibilidad de que un especulador financiero ocupe la presidencia de nuestro país es una amenaza real, no digo para los futuros cesantes, sino para los intereses del pueblo. La derecha, y Piñera en particular, han explicitado claramente estar a favor de entregar CODELCO a las transnacionales mineras; de terminar de privatizar todo lo que no han alcanzado a enajenar los neoliberales enquistados en la Concertación; pero lo que es más grave, han señalado claramente su disposición de reprimir a su manera clásica –digo su inveterada solución trágica- la protesta de los movimientos sociales y de los trabajadores.
De allí a la necesidad que todos los actores políticos y sociales demos muestras claras de una capacidad de deponer egoísmos y criterios estrechos –que lamentablemente no poco de esto se ha visto en los gobiernos de la Concertación- y comencemos todos a reencantar a la gente en la idea de la “solución democrática”. Tenemos que reinstalar la decencia en la política y dar una señal muy potente de que a quienes quieren nadar en esas aguas cenagosas les iremos achicando cada vez los espacios.
También hay que decir poco ayuda estar encumbrándole la cambucha gratis a la derecha; como fueron las demasiado generosas palabras del Ministro del Interior, Edmundo Pérez Yoma, en su última visita a la ciudad. No es buena señal pues alienta el derrotismo que ha hecho presa en no pocos sectores de la Concertación local.
Volviendo a la propuesta de acuerdo parlamentario hecha por el PC, Fuerza País y otras personalidades locales, de no prosperar esta generosa iniciativa, el PC y Fuerza País, así como otras personalidades locales, estudian levantar un bloque contra la exclusión al que debieran concurrir las voluntades ya expresadas la semana pasada y diversos dirigentes sociales que se podrían sumar. Se trata de hacer un tejido social, político y cultural transversal donde convergan todas las iniciativas que sirvan para cerrarle el camino a la exclusión social y política de esta importante franja de la sociedad.

Epifanio Flores


Partido Comunista de Chile - Comite Regional Iquique